Praga: Una auténtica experiencia encantada Praga

Ciudad, capital de la República Checa. Situada en el corazón de Europa, es una de las ciudades más bellas del continente y el principal centro económico y cultural checo. La ciudad posee un rico patrimonio arquitectónico que refleja tanto las inciertas corrientes de la historia de Bohemia como una vida urbana que se remonta a más de 1.000 años.

Las atracciones físicas y los monumentos de Praga son numerosos. Entre los más destacados está el Puente de Carlos (Karlův most), que se alza a horcajadas sobre el río Moldava. El curso sinuoso del Moldava, con su sucesión de puentes y vistas cambiantes, contrasta con el telón de fondo siempre presente del gran castillo de Hradčany (Castillo de Praga), que domina la región de la orilla izquierda de la ciudad desde detrás de unas enormes murallas situadas en lo alto de una colina. Las estrechas calles y las pequeñas tabernas y restaurantes de los barrios más antiguos contrastan con la amplitud de la plaza de Wenceslao y los modernos parques y urbanizaciones, mientras que los grandes palacios barrocos del siglo XVIII poseen su propia elegancia y esplendor. Vistas desde las colinas circundantes, las numerosas torres de las iglesias conforman una perspectiva única, dando a Praga su descripción como la "ciudad de las cien agujas". Esta armonía arquitectónica se vio reforzada por la planificación posterior a 1945, que preservó el núcleo antiguo de la ciudad como monumento principal y supervisó cuidadosamente todas las construcciones modernas. En 1992, el centro histórico de la ciudad fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.